domingo, 3 de noviembre de 2013

Importancia del Capital Humano en el Desarrollo Agropecuario

Las principales corrientes actuales del pensamiento económico y social dan una importancia central al capital humano - y en particular a la necesidad de su formación por medio de la educación - en el crecimiento en general, y en el rural agropecuario en particular. Gran cantidad de estudios muestran la evidencia empírica de esto. Los factores de producción decisivos para mejorar el bienestar de la gente no son el espacio, la energía y los avances en el conocimiento. El capital humano contribuye a la productividad laboral y a la habilidad empresarial.

La importancia de la formación de capital humano para incrementar la productividad y reducir la pobreza también ha sido resaltada por Gary S.Becker, quien ha constatado que se requiere de la participación conjunta de trabajadores, administradores calificados y empresarios innovadores para operar maquinaria complicada, producir con eficiencia, desarrollar nuevos productos y procesos, y aprovechar las innovaciones provenientes de otros países.

El capital humano es el principal activo de cualquier población, y se estima que comprende cerca de 80% de la riqueza de Estados Unidos y otros países desarrollados (lo cual implica salud, educación y capacitación  en el trabajo o de otro tipo). Así, la desigualdad en los ingresos de una nación se corresponde con la desigualdad de su educación.

Según la CEPAL, ampliar la educación hacia las mujeres pobres se refleja en mejores condiciones de salud de sus familias debido a que la escolaridad es determinante para reducir la morbilidad y la mortalidad infantil, al igual que las tasas de fecundidad y para mejorar la nutrición .

Para el Banco Mundial, el contenido de educación debe cambiar de forma sustancial con el objetivo de que agricultores, empresarios agrícolas y asalariados rurales estén preparados para enfrentar la demanda cambiante de los mercados y no únicamente para elaborar la producción. Esto requiere mejorar la coordinación entre los organismos involucrados en la educación agropecuaria, incluir metas educativas en las estrategias de desarrollo del sector y coordinar inversiones en tres áreas agrícolas fundamentalmente e interrelacionadas: investigación, extensión y educación superior.

Así pues, la educación de los productores agropecuarios es determinante para mejorar la productividad agrícola. Schulz, plantea que hay tres efectos potenciales de la educación sobre la producción agrícola:


  1. el aumento de la productividad mediante la mejora de la calidad del trabajo, que permite al agricultor producir más con los mismos insumos;
  2. el "efecto de asignación", que mejora la capacidad del productor para procesar información técnica y asignar recursos para usos competitivos, disminuyendo los costos por análisis de información;
  3. la educación facilita una rápida respuesta empresarial a los desafíos planteados por el cambio tecnológicos en términos de precios de insumos y productos.
Cerca de 2,2 millones de dominicanos, 25% de la población en el medio rural, padecen hambre. LA desnutrición limita las capacidades y potencialidades productivas de los pobladores rurales dominicanos. La población duran tiene una escolaridad promedio de apenas seis años y más de 40% de las escuelas rurales imparten sólo hasta el cuarto grado de primaria.

La falta de capital humano afecta la absorción y puesta en practica  de nuevas técnicas y dificulta la incorporación  de nuevas variedades y productos. El bajo nivel de instrucción de los productores es un obstáculo para ello. Capacitar administradores de fincas ganaderas - que elevaría los rendimientos y la competitividad, facilitaría la transmisión de técnicas y la aplicación de medidas sanitarias e incrementaría la eficiencia de los hatos lecheros.

Estracto del libro : La Republica Dominicana en 2030: hacia una nacion cohesionada. Cepal, 2009.